por Marcos Rojas Martín
estoy un poco jodida
si me quiero llamar marta
marta es el nombre de mi hermana
se lo pusimos entre mi madre y yo
cuando estábamos charlando en la cocina
mientras apoyaba el extremo de la palma
de mi mano inquieta en la silla
mientras movía la caderita
hacia la derecha
“me gusta luna”, dijo mi madre
hojeaba una revista de nombres:
la revista clara, o la revista serpadreshoy
en nuestra casa tenemos mil revistas
sobre nombres, etimologías y horóscopos
que mi madre ha ido comprando en los noventa
yo solo compré dos plaquitas con mi nombre “marcos”
(“viril”, “martillo”)
y el de mi hermana
cuyo significado no recuerdo
“luna no me gusta”, le contesté
luna no es un nombre, no asocio a lo que no imagino
con “luna”
“‘marta’ me gusta”
algo en la calma de mi madre
tras escuchar mi respuesta
hizo que la convenciera
porque no debatimos mucho más el tema,
aunque a mi madre le encanta debatir
(ser “contestataria”, me diría ella)
ahora yo estoy bien jodida
porque no me imagino con otro nombre
que el de marta para mí
y la marta que conozco no se parece a mí,
la veo lejana como nos ve ella a cada uno de nosotrxs
estudio letras y ella cienciasen sus estanterías hay videojuegos y en la mía hay libros
ella come comida basura y yo solo como verdura
aunque sí que nos gustan a ambxs los osos,
nos hemos drogado con gente que no nos hemos cruzado,
y nos educamos con internet y con el silencio
somos dependientes del cariño de lxs otrxs
y dejamos la casa para encontrarlo
luego nos reciben y comemos
o potaje o sopa de ajo
con un calor extraño que da la noche vacía
y la cocina iluminada