por Lorenzo Cao
El filo perdió el falo
el sonido de vuelta
punzó.
El filo rompió su convección,
como un durazno mi piel lo espera.
El filo perdió el falo, el sonido de vuelta
punzó.
El dedo, el sol y el viento
perdieron el falo
Dios lo perdió
não fala mais.
Ya no hay más meta-,
meta-,
meta-,
mi vida entremedio: yo no me meto.
Yo meto piedras, uvas, monedas, baterías
cicatrices en mi boca
Yo puedo romperme
y entre lo dicho salir.
Ya, la palabra trepa
por mis cicatrices, habla
las abre y
el carozo cae
de mi boca
el falo vuelve y
acaba
en mis oídos
punzó.