La pequeña amnesia del sueño

por Verónica Castagnino

La pequeña amnesia del sueño
la resurrección de una pupila contrayéndose 
La excusa del andar cíclico de los astros
para creer y empezar
como una máquina que no entiende
pero funciona. 

Levanta las tazas 
formando torres endebles, 
en el silencio 
de un mundo abandonado
después del desayuno. 

Apenas visible
como el personal de un hotel
susurrando sobre las transitadas alfombras,
hace las camas 
sin olvidar mirar hacia atrás 
dos pasos antes de salir cuarto: 
Porque hay algo cercano a la magia 
en el polvo que vuela bajo la luz
y en el orden que surge de sus manos.

Todo lo que hace
se desvanece con las horas
el polvo se reproduce
el canasto de ropa sucia 
eternamente  lleno
y la comida dura menos
que su aroma.

Todo está vivo
solo porque termina,
los quehaceres domésticos
tienen duración de insecto. 

El sol entra por la ventana de la cocina
y con su  rayo vuelve el fuego de la hornalla
invisible.
Ese peligro de quemadura
o de futura explosión,
Esa llama que no se ve
se parece a ella
confinada 
al secreto 
de trabajar en su casa.